¡Hola! Mi nombre es Angelina Merino, soy Terapeuta Ocupacional de la Universidad de Chile, con más de 40 años de experiencia laboral y siempre he trabajado con personas con discapacidad intelectual, fomentando su inclusión social y laboral. Desde hace 18 años soy Directora ejecutiva de Fundación Incluir y dentro de mis responsabilidades, se encuentra dirigir las diversas actividades dentro de la Fundación, promover su crecimiento y velar por el buen funcionamiento del equipo de profesionales que preparan socio laboralmente a nuestros jóvenes y adultos. Te invito a que nos sigas conociendo.
Somos especialistas en inclusión. Generemos un mundo más inclusivo.
Angelina, cuéntanos un poco de ti y de la fundación
Soy Angelina Merino, casada, madre de 3 hijos, y abuela de 7 nietos.Soy Terapeuta Ocupacional de profesión, egresada de la Universidad de Chile.
Mi primer trabajo fue en Coanil, en la creación de talleres laborales, luego me fui a Iquique donde trabajé en programas vocacionales y laborales en la región y volví a Santiago, donde trabajé 11 años como Coordinadora Técnica de los Talleres de Adaptación y Desarrollo. Después de toda esa experiencia, llegué a un momento de mi vida en el que sentí que debía emprender un nuevo desafío, el de crear algo nuevo para las personas con discapacidad. Es ahí donde nace Fundación Incluir (2005) y este año cumplimos 18 años de vida, con la misión de capacitar e incluir social y laboralmente a personas con discapacidad intelectual.
¿Qué es para ti la inclusión?
Todas las personas tenemos habilidades y potencialidades propias, somos distintamente capacitadas y todos tenemos limitaciones. Nuestras distintas necesidades exigen respuestas diversas o diferentes. La inclusión busca que se fomente y garantice que toda persona sea “parte de” y que no permanezca “separado de”. Inclusión, por lo tanto, es entendernos y aceptarnos en nuestras diferencias, entregar los apoyos necesarios para que todos tengamos acceso y participación en esta sociedad.
La inclusión debería ser parte natural de sociedad, así como somos dentro de la familia donde cada uno es distinto, hay respeto a las diferencias y apoyos en las necesidades.
¿Por qué es importante la inclusión?
La inclusión en Chile es muy importante porque tenemos un país con muchas desigualdades, pocas oportunidades, muchos prejuicios y paradigmas frente a personas que salen de la “norma”. Es vital ir igualando la cancha para todos, visibilizando esta realidad, creando conciencia, respeto y oportunidades reales de participación.
¿Qué has aprendido en todos estos años como fundadora y directora de Fundación Incluir?
La vida es un constante aprendizaje y eso es maravilloso, el día a día está lleno de desafíos y hay que tomarlos siempre como nuevos aprendizajes para ir mejorando, desarrollando sueños y proyectos. Mi lema de vida es “A cada día su afán”. El mayor aprendizaje es y ha sido el estar presente, flexible a los cambios y a los desafíos que se van presentando en estos años como directora de la Fundación. Fundamental ha sido el contar con apoyo incondicional de los directores, equipo técnico y familias de la Fundación.
¿Qué sueños o metas tienes para la fundación?
Nuestro gran sueño siempre ha sido contar con una casa propia para desarrollar las actividades. Nuestra meta es poder incluir cada vez más personas a la vida del trabajo independiente, generar más oportunidades de preparación laboral y de prácticas laborales y ampliar nuestra capacidad para recibir en la Fundación a más personas con discapacidad intelectual que necesitan nuestros programas.
¿Qué le dirías a los padres de hijos con discapacidad intelectual?
Creo que los padres son los que mejor conocen a sus hijos, son los principales y mejores facilitadores de su desarrollo, nosotros aprendemos de ellos y con ellos. Solo les diría que nosotros como Fundación pondremos siempre todo nuestro compromiso, cariño y responsabilidad en beneficio del mejor desarrollo de sus hijos.
¿Qué le dirías a la sociedad sobre la inclusión?
Que la inclusión debiera ser parte natural de la sociedad, así como somos dentro de la familia, donde cada uno es distinto, hay respeto a las diferencias y apoyos en las necesidades. El día en que la inclusión no sea tema, tendremos una sociedad inclusiva.